Un libro sigue estando vivo mientras su esencia siga latente en la memoria de aquéllos que viajaron entre sus líneas. En mi caso, Girasoles al amanecer sigue viviendo en cada uno de mis discursos pues al expresar su contenido una y otra vez, al recorrer sus pasajes repetidamente, sigo aprendiendo más allá de sus capítulos.
Más allá de los géneros literarios busco la intimidad de la página, el susurro de la medianoche, ése que me hace escribir sobre las cosas que nunca nos planteamos a la luz del día cuando otros asuntos acaparan nuestra atención. Busco ese espacio en el cual escritor y lector se encuentran e intercambian roles, de tal manera que el que escribe está leyendo en su sangre, en sus recuerdos, en sus vivencias…, y el que lee reescribe y reinterpreta sus recuerdos, sus circunstancias y sus percepciones sobre sí mismo y sobre la vida. Busco, en definitiva, crear páginas abiertas a tantas interpretaciones como lectores a quienes lleguen sus contenidos…
Girasoles al amanecer en Alcaudete / Jaén / Dentro del Programa de Actos dedicados a conmemorar el Día de la Biblioteca
¡¡¡Gracias, Alcaudete, por mostrarme en este reencuentro que todos hemos crecido un poco más, desde que vine a presentaros Semillas de un sueño!!!